Después de completar un breve curso de joyería sin tener idea de qué hacer, me encontraba sentada en la cocina, que fungía como mi "laboratorio", revisando y guardando los proyectos realizados durante el curso. Mi perrita Canela, una  perrita Salchicha color fuego con hermosos ojos almendrados delineados en marrón, se acercó con su característico andar, se sentó a mi lado y le pregunté (esperando una respuesta, por supuesto): "Canela, ¿qué hacemos ahora?". Ella, sin dudarlo, se levantó sobre sus patas, se apoyó en mi pierna y lamió mi mano. Mi interpretación de su gesto: "todo estará bien".

Laminé un poco de metal, dibujé la silueta de un dachshund y comencé a completar una joya, sin muchos detalles, solo la silueta de quien en ese momento me dijo "todo estará bien".

Efie nace de Canela, mi perrita Salchicha, que ha sido mi compañera, el sol que ha iluminado mi camino. Desde entonces, me dedico a transformar el metal en un rayo de amor, rico en sentimientos y recuerdos de nuestros animales.

Los años y la confianza de quienes han elegido nuestro trabajo han permitido que cada simple diseño de joyería se convierta en una personalización de sus vidas, sus deseos y sus recuerdos, transformando cada creación en una pieza única que trasciende y evoluciona a lo largo de la vida.